¿A qué situaciones te expones si no registras tu marca?

¿Qué vas a encontrar en este post?

Si en este momento estás al frente de un proyecto empresarial sólido, con expectativas de que pueda tener una larga trayectoria, ¡no lo pienses! Registra tu marca.

Con tu registro obtendrás la titularidad de la misma y podrás evitar que otros se lucren a costa de la buena reputación obtenida con tu denominación durante los últimos años, ya que podrás emprender acciones legales contra tus empresas competidoras.

Es verdad que durante los últimos meses desde Conexia Studio te hemos explicado que no todo acaba con el registro de tu marca en la Oficina Española de Patentes y Marcas (O. E. P. M.). También debes inscribir tu sociedad en el Registro Mercantil, así como debes registrar el dominio de tu marca en Internet para darte a conocer también de manera online.

Por supuesto, te recomendamos que realices estos tres pasos que te acabamos de indicar. Pero, no te confundas. Ni la inscripción en el Registro Mercantil ni el registro de tu dominio resultan acciones suficientes para que la Justicia te ampare frente a otras acciones lesivas que pueda realizar tu competencia. El único documento que puede acreditar tu titularidad respecto a la marca es el registro de la misma en la O. E. P. M.

Por otra parte, si ahora estás al frente de una empresa que no has fundado tú, sino que la has adquirido tras su compra, o en subasta, asegúrate de que también has obtenido la titularidad de su marca. El propietario de la misma podrá venderte la marca o podrá transferírtela.

Es importante que te asegures de que todo lo referente a la marca está en regla y que a ti se te reconoce como titular de la misma. De esta manera, evitarás futuros conflictos con el titular original de ésta, o bien con sus familiares o herederos. Y para ponerte en situación, y entiendas a qué te puedes exponer si no sigues nuestro consejo, te comentamos a continuación cuál fue el desenlace del Hotel Ritz de Barcelona por no tener la titularidad de la marca.

El caso del Hotel Ritz de Barcelona

En el año 2005 una sentencia del Tribunal Supremo obligó al Hotel Ritz de Barcelona a desvincularse de este nombre y a retirar cualquier emblema en el que figurase esa denominación. Una decisión que afectó, entre otros elementos, a cambio de vajilla, papelería, dominio web, todo tipo de publicidad y fachada exterior. Este último elemento  quizás fue el más complejo de modificar, ya que en un relieve histórico aparecía la denominación del hotel, que fue sustituida por el año de su fundación, 1919. A partir de ese momento, pasó a ser el Hotel Palace. Todos los cambios realizados como consecuencia de esta sentencia fueron valorados en 10 millones de Euros.

Este hotel fue adquirido, en una subasta, por Joan Gaspart en el año 1975, tras haberle sido embargado a la familia Muñoz Ramonet. Posteriormente, en el año 1996, y tras una larga batalla judicial con los herederos del antiguo propietario, los gestores del establecimiento recibieron una resolución judicial que dictaminó que la marca Hotel Ritz de Barcelona pertenecía a los Muñoz Ramonet. Familia que, en ese momento, gestionaba un establecimiento colindante con el mismo nombre.

A pesar de que Gaspart intentó esquivar el problema, obteniendo una licencia de uso de signo que le fue otorgada por el Hotel Ritz Madrid, esta solución sólo solventó el problema de manera temporal. Once años después tuvo que renunciar definitivamente a esa denominación e invertir una importante suma de dinero como consecuencia del cambio de su denominación.

SI TE HA GUSTADO ESTE POST, COMPÁRTELO!